ENERGÍA SOLAR TÉRMICA
Agua Caliente Solar
Todos los sistemas solares de producción de agua caliente sanitaria funcionan con el mismo principio: un captador transforma la radiación solar en calor que utiliza para el calentamiento del agua de un depósito. La energía solar queda almacenada para su utilización en cualquier momento del día o de la noche. La disponibilidad permanente de agua caliente a la temperatura deseada se garantiza con un sistema complementario con una energía tradicional (electricidad, gas, gasóleo, ...) que, en ocasiones, puede integrarse en el mismo depósito solar. Durante los meses de fuerte insolación, la energía solar es suficiente para cubrir la totalidad de la demanda de agua caliente sanitaria.
Una instalación típica de agua caliente para una vivienda se compone de tres elementos:
- Unos captadores solares, instalados normalmente en la cubierta del edificio, orientados al sur y inclinados de 20 a 45º respecto al horizontal.
- Un depósito de acumulación, situado normalmente en el interior de la vivienda
- Otros componentes como válvulas, bombas, elementos de regulación, ...
Cuantos captadores necesito?
Normalmente, son necesarios de 1 a 2 m2 de captadores para calentar 100 litros de agua.
Una familia de cuatro a seis personas puede elegir un equipo individual de 4 m2 de captadores y 250 litros de acumulación. Con una utilización normal, este equipo será suficiente para cubrir más de la mitad de las necesidades anuales de agua caliente sanitaria de toda la familia y evitará cada año la emisión al ambiente de más de 1 tonelada de CO2, principal responsable del efecto invernadero.
Energía solar para calefacción
La energía solar se puede utilizar en sistemas de calefacción doméstica. Esta aplicación utiliza habitualmente un suelo radiante de baja temperatura como elemento calefactor. Los captadores solares calientan el suelo, que almacena esta energía intermitente y la cede suavemente a la vivienda, gracias a su inercia.
Un suelo radiante solar se compone habitualmente de tres elementos:
- Unos captadores solares que transforman la radiación solar en calor y la ceden a un circuito de agua.
- Un suelo radiante calentado por el agua caliente de los captadores.
- Un conjunto de elementos (grupo de transferencia) que gestionan la calefacción de la vivienda, la producción de agua caliente y, en ocasiones, el calentamiento del agua de una piscina.
El objetivo de una instalación solar no es cubrir el 100% de las necesidades de calefacción de la vivienda. Hay que prever un sistema de apoyo, que puede compartir algunos elementos de la instalación solar.
Este sistema de calefacción proporciona un elevado grado de confort, ya que aprovecha una energía limpia, permite un óptimo reparto de la energía, funciona a baja temperatura (unos 25ºoC) y no necesita elementos emisores visibles.
Cuantos captadores necesito?
Aproximadamente, se debe prever 1 m2 de captador solar por 5 a 10 m2 de suelo radiante.
Por una vivienda de 150 m2 de superficie son suficientes 15 a 20 m2 de captadores, en función de la inercia del suelo, el aislamiento, las condiciones climáticas, ... La instalación solar se debe diseñar a partir de las necesidades específicas de cada vivienda.
Un sistema solar puede proporcionar calefacción y agua caliente sanitaria a una vivienda durante todo el año, con un ahorro de energía convencional superior al 50% de las necesidades energéticas y evitando la emisión al ambiente de más de 4 toneladas de CO2 al año.
Energía solar para el calentamiento de piscinas
Para el calentamiento de piscinas exteriores se utilizan normalmente captadores solares simplificados, sin vidrio. Este material es económico, modular y de fácil utilización.
En clima mediterráneo, una superficie de captadores solares del orden del 40 al 50% de la superficie de la piscina es suficiente para alargar su utilización de mayo a octubre.